Bumpers... Petacos... Tilt... Milk... ¿¡MILFS!? Vale, lo reconozco, estoy hecho un lío. No tengo ni pajolera idea de pinballs. Para eso estoy aquí. Para aprender. Acompañad a este humilde "bufón del pinball" en su aventura entre petacos. Hoy presentamos...
"The Champion Pub" es, probablemente, el pinball más inmersivo que he jugado. Siempre he pensado que un pinball no podía contar bien una historia como puede hacerlo una película, un libro o un videojuego... hasta ahora.
"The Champion Pub" es un pinball con tantos elementos estéticos, sonoros y jugables que logra que el jugador se sienta realmente repartiendo guantazos en un tugurio de algún puerto en la época victoriana. Y es que eso es lo que nos cuenta el pinball (sus instrucciones dedican 5 hojas a la historia del juego)... eres un marinero sin trabajo que va dando tumbos de taberna en taberna hasta que el destino revela que tu futuro no está en el mar, sino en los cuadriláteros de un pub de mala muerte.
El playfield está cargado de elementos que recrean perfectamente la acción del juego: un saco de boxeo, un boxeador 100% irlandés totalmente articulado que representa a nuestros rivales, una cuerda de saltar de entrenamiento, bailarinas del pub, etc.
El apartado sonoro no sólo se queda atrás, sino que es de los más completos que he escuchado: músicas que ambientan a la perfección una taberna de la época victoriana, las voces de tu entrenador, la muchedumbre jaleando mientras peleas... y los inolvidables comentarios de tus rivales (My name is Armando Santiago... prepare to die!).
Un buen puñado de misiones y juegos adicionales (póker, mover una escupidera para recoger los escupitazos de los bebedores de la barra, etc.) se encargan de poner la guinda a un pinball que no flaquea en ninguno de sus aspectos. Un pinball... ¡Campeón!
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